Adaptabilidad ( del latín adaptō, "adaptarse a, ajustarse") es una característica de un sistema o de un proceso. Esta palabra se ha utilizado como término especializado en diferentes disciplinas y en operaciones comerciales. Las definiciones de palabras de adaptabilidad como término especializado difieren poco de las definiciones del diccionario. Según Andresen y Gronau [1], la adaptabilidad en el campo de la gestión organizacional puede verse en general como una capacidad de cambiar algo o a uno mismo para adaptarse a los cambios que ocurren. En ecología, la adaptabilidad se ha descrito como la capacidad de hacer frente a perturbaciones inesperadas en el medio ambiente.
En lo que respecta a los sistemas y procesos empresariales y de fabricación, la adaptabilidad se ha considerado cada vez más un factor importante para su eficiencia y éxito económico. Por el contrario, se considera que la adaptabilidad y la eficiencia son opuestas entre sí en los sistemas biológicos y ecológicos, lo que requiere un equilibrio, ya que ambas son factores importantes para el éxito de dichos sistemas. [2] Para determinar la adaptabilidad de un proceso o un sistema, se debe validar en relación con algunos criterios.
En las ciencias de la vida, el término adaptabilidad se utiliza de diversas formas. En un extremo del espectro, el significado ordinario de la palabra es suficiente para comprenderla. En el otro extremo, está el término introducido por Conrad [3], que se refiere a una medida particular de entropía de información de la biota de un ecosistema o de cualquier subsistema de la biota, como una población de una sola especie, un solo individuo, célula, proteína o gen.
En el campo de la investigación técnica, esta característica se ha tenido en cuenta recién a fines de la década de 1990. HP Wiendahl introdujo por primera vez la adaptabilidad como una característica necesaria de un sistema de fabricación en 1999. [4] La necesidad de considerar la adaptabilidad surgió en el contexto de la planificación de fábricas, donde el objetivo es desarrollar sistemas modulares y adaptables. Ahora se ha convertido en una consideración importante para los ingenieros de fabricación y de sistemas.
En este caso, la adaptabilidad se entiende como la capacidad de un sistema (por ejemplo, un sistema informático ) de adaptarse de forma rápida y eficaz a circunstancias cambiantes. Por tanto, un sistema adaptativo es un sistema abierto que es capaz de adaptar su comportamiento a los cambios en su entorno o en partes del propio sistema. Por ello, se puede expresar la exigencia de reconocer la demanda de cambio sin que intervengan otros factores. [5] [6]