La Virgen de Ger es una escultura del siglo XII expuesta en el Museo Nacional de Arte de Cataluña en Barcelona . [1] [2]
Las imágenes talladas en madera eran uno de los elementos básicos de una iglesia románica y se ubicaban principalmente en torno al altar. Se colocaban en lugares destacados, pero también podían utilizarse como relicarios y, en ocasiones, participaban en determinados actos litúrgicos como las procesiones.
La Virgen de Ger es uno de los ejemplos más importantes de talla en madera del siglo XII en Cataluña, tanto por la tipología que representa como por su brillante técnica. A estas características hay que añadir su buen estado de conservación general. Iconográficamente, responde al concepto de María como Sedes Sapientiae –es decir, sede de la sabiduría– y simboliza a la Iglesia. Por ello, la figura del Niño aparece de frente y rígida, sin ningún signo que lo relacione con María. Cabe destacar la suavidad de los rasgos faciales de María y de los pliegues de su vestimenta.
Por fotografías de principios del siglo XX sabemos que esta imagen fue retocada y adaptada a una nueva concepción del tema. El Niño fue trasladado y colocado sobre la rodilla izquierda de María. Este hecho es de gran interés ya que nos recuerda que algunas de estas obras fueron utilizadas fuera de la época en la que fueron creadas y fueron adaptadas a las nuevas exigencias del culto y del pensamiento religioso.