El cañón solar o heliobeam es un arma orbital teórica que utiliza un espejo cóncavo montado en un satélite para concentrar la luz solar en un área pequeña de la superficie de la Tierra, destruyendo objetivos o matando mediante calor.
En 1929, el físico alemán Hermann Oberth desarrolló planes para una estación espacial desde la cual se podría utilizar un espejo cóncavo de 100 metros de ancho para reflejar la luz solar sobre un punto concentrado de la Tierra. [1]
Más tarde, durante la Segunda Guerra Mundial , un grupo de científicos alemanes en el campo de pruebas de artillería del ejército alemán en Hillersleben comenzaron a ampliar la idea de Oberth de crear una superarma que pudiera utilizar la energía del sol. Este llamado "cañón solar" ( Sonnengewehr ) sería parte de una estación espacial a 8.200 kilómetros (5.100 millas) sobre la Tierra. Los científicos calcularon que un enorme reflector, hecho de sodio metálico y con un área de 9 kilómetros cuadrados (900 ha; 3,5 millas cuadradas), podría producir suficiente calor concentrado para hacer hervir un océano o quemar una ciudad. [1] Después de ser interrogados por oficiales estadounidenses, los alemanes afirmaron que el cañón solar podría completarse en 50 o 100 años. [1] [2]
Con el despliegue y validación de megaconstelaciones de satélites , también se ha propuesto su uso como cañón solar. En lugar de un gran espejo individual, en teoría se podrían sincronizar cientos de reflectores de bajo coste para concentrar la irradiancia solar y dirigirla hacia un objetivo. [3]