Pero en ver de publicarlo en una revista, él registro una patente en Estados Unidos y Grecia.
Su descubrimiento pasó desapercibido por varios años hasta que el principio del enfoque intenso fue redescubierto en 1952 y aplicado a los aceleradores de partículas de Brookhaven, Universidad Cornell y el CERN.
En 1956 se unió al Laboratorio de Radiación Lawrence Livermore.
Si sus hipótesis eran correctas servirían para ser utilizadas como arma en la desactivación de satélites enemigos.
Christofilos comprobó sus teorías, pero la aplicación conjunta de radiación y campo magnético como arma no funcionó.