El desarrollo del personal docente es un término que se utiliza de manera similar al desarrollo del personal y al desarrollo profesional en entornos relacionados con los educadores. [1]
El desarrollo profesional de los educadores puede incluir la formación de profesores y, por lo general, se considera previo al servicio, o antes de comenzar a enseñar. Sin embargo, tanto el desarrollo del profesorado como el desarrollo profesional pueden utilizarse para referirse al aprendizaje profesional continuo de los educadores. Dicho aprendizaje puede tener lugar durante las horas de trabajo, como "en servicio" en entornos de K-12, o puede ser fuera del horario laboral. Estas actividades de aprendizaje pueden ser con crédito o sin crédito; por lo tanto, pueden ser con una universidad, a través de un distrito escolar o una agencia de consultoría privada. Además, los educadores pueden buscar el desarrollo profesional de aprendizaje autodirigido , aunque el término desarrollo del profesorado se aplica con menos frecuencia a este ámbito de actividad.
El desarrollo y el desarrollo profesional del personal docente de educación primaria y secundaria y el desarrollo y el desarrollo profesional del personal docente de educación superior tienen tradiciones, prácticas y terminologías muy diferentes. [2] [3] El desarrollo del personal docente de educación superior está comenzando a realizarse no solo presencialmente sino también en línea. [4] Los talleres facilitados, ya sea en persona o en línea, son las formas dominantes de desarrollo del personal docente para los instructores. Los temas a menudo incluyen la mejora del diseño de los cursos, las técnicas de evaluación del aprendizaje y la pedagogía innovadora.
Muchas instituciones de educación superior en los Estados Unidos tienen un centro dedicado al desarrollo del personal docente porque el desarrollo del personal docente es una prioridad clave. El desarrollo del personal docente también se conoce como "desarrollo educativo", que incluye centros de enseñanza y aprendizaje (CTL). [5] Algunas universidades también se refieren a estos servicios como centros de desarrollo del personal docente (FDC). Los objetivos de los CTL y FDC son diversos. Además de las mejoras educativas, los objetivos incluyen el avance profesional del personal docente, el desarrollo del ambiente y la comunidad en el lugar de trabajo y en el aula, y el desarrollo profesional de los estudiantes de posgrado. Además, algunas unidades académicas tienen sus propios esfuerzos de desarrollo del personal docente para promover la enseñanza y el aprendizaje en sus contextos disciplinarios, profesionales o de campo. Además, los bibliotecarios académicos también han asumido funciones de desarrollo del personal docente, aportando la formación y la experiencia bibliotecarias a colaboraciones eficaces que apoyan el desarrollo del personal docente. [6]