Los debutantes (inglés: The Debutantes ) es unapelícula dramática chilena de 2003 dirigida por Andrés Waissbluth y protagonizada por Antonella Rios y Alejandro Trejo .
Dos hermanos, Silvio y Víctor, se mudan de su ciudad natal de Temuco a Santiago tras la muerte de sus padres. Silvio trabaja para financiar la educación de Víctor y, el día que Víctor cumple diecisiete años, lo lleva a clubes nocturnos donde lo anima a perder su virginidad con una de las strippers/prostitutas del club. En un momento conmovedor, Víctor se enfrenta a su creciente impotencia mientras Silvio impresiona a los dueños del club con su potencial como empleado.
Silvio consigue un trabajo como guardaespaldas/esbirro de la pandilla, ganando una cantidad importante de dinero para apoyar la educación de Víctor. Sin embargo, Víctor se enamora de Gracia, una de las bailarinas del club, y comienza a cortejarla, abandonando la escuela y provocando la ira y la decepción de Silvio. Desafortunadamente, Gracia es la amante del jefe de la pandilla, Don Pascual, quien también es el jefe de Silvio. Gracia es el hilo conductor que conecta la historia, ya que está involucrada con Víctor, Silvio y Don Pascual, y las consecuencias de su extraño triángulo amoroso son mortales. Al contar la misma historia desde los puntos de vista de Víctor, Silvio y Gracia, la película expone las vulnerabilidades y los defectos de cada personaje, lo que conduce al sórdido clímax.
En esta película hay una escena en la que Anita Alvarado le practica una breve felación no simulada a Juan Pablo Miranda. [1]
La película fue la propuesta chilena para la 76.ª edición de los Premios Óscar en la categoría de Mejor Película en Lengua Extranjera que se llevó a cabo en 2004, pero no fue una de las cinco películas nominadas. [2] También fue nominada a los Premios Goya . [3]
La película se lanzó en DVD en el Reino Unido en 2005 y recibió una reseña ligeramente crítica en Time Out. [4]