La kinesiogenómica se refiere al estudio de la genética en las diversas disciplinas del campo de la kinesiología , el estudio del movimiento humano. El campo también se ha denominado " genómica del ejercicio " o "genómica del ejercicio". Las áreas de estudio dentro de la kinesiogenómica incluyen el papel de la variación de la secuencia genética (es decir, alelos ) en el rendimiento deportivo, la identificación de genes (y sus diferentes alelos) que contribuyen a la respuesta y adaptación de los sistemas tisulares del cuerpo (p. ej., músculos, corazón, metabolismo). , etc.) hasta diversos estímulos relacionados con el ejercicio, el uso de pruebas genéticas para predecir el rendimiento deportivo o individualizar la prescripción de ejercicio, y el dopaje genético , el potencial de la terapia genética para mejorar el rendimiento deportivo.
El campo de la kinesiogenómica es relativamente nuevo, aunque dos libros han esbozado conceptos básicos. [1] [2] Un artículo de revisión publicado periódicamente titulado "El mapa genético humano para el rendimiento y los fenotipos de fitness relacionados con la salud", describe los genes que se han estudiado en relación con rasgos específicos relacionados con el ejercicio y el fitness. La actualización más reciente (séptima) se publicó en 2009. [3]
Dentro del campo de la kinesiogenómica se han realizado varios estudios de investigación en los últimos años. Este aumento en la investigación ha llevado a avances en el conocimiento al asociar cómo los genes y la secuenciación de genes afectan los hábitos de ejercicio y la salud de una persona. Un estudio centrado en gemelos buscó ver el efecto de los genes sobre la capacidad de hacer ejercicio, los efectos del ejercicio sobre el estado de ánimo y la capacidad de perder peso. La investigación concluyó que la genética tenía un impacto significativo en la probabilidad de que un individuo participara en ejercicio. Un aumento en la participación puede estar relacionado con factores de personalidad como la automotivación y la autodisciplina, mientras que una menor participación en el ejercicio puede estar influenciada por factores como la ansiedad y la depresión. Estos rasgos de personalidad, tanto positivos como negativos, pueden asociarse con la composición genética de cada uno. [4] [ se necesita fuente no primaria ]