Jaime es una película dramática portuguesa de 1999 dirigida por António-Pedro Vasconcelos . Fue lanzado el 9 de abril de 1999. [1]
Una mujer se lleva a su hijo pequeño, abandona a su marido y se va a vivir con su amante. El chico, desesperado por volver a reunir a sus padres, se convence de que si consigue recuperar la moto robada de su padre todo volverá a estar bien, así que se propone conseguir el dinero suficiente para comprarle una nueva a su padre. Una historia nada sentimental sobre niños de la calle menores de edad en Portugal. La película comienza con un trabajador adolescente de una panadería que es abandonado en un hospital tras perder un dedo. El jefe le ordena al padre del joven que diga a los médicos que perdió el dedo jugando con un cuchillo, pero temiendo una investigación, el jefe abandona posteriormente a sus otros trabajadores menores de edad, entre ellos Jaime (Saul Fonseca), de 13 años. Jaime está luchando por recomponer su destrozada familia. Su madre echó a su padre de casa y se ha juntado con un brasileño de mala reputación. Su padre, desconsolado, se mudó a una chabola y ha estado desempleado desde que le robaron la moto. Las esperanzas de Jaime de poder reunir a su familia comprándole a su padre una nueva moto se ven frustradas cuando el brasileño le roba su dinero; Jaime se muda de la casa de su madre a la de su padre. Mientras tanto, Jaime y su compañero Ulisses (Sandro Silva) duermen durante el día en la escuela y buscan oportunidades laborales por la noche. [2] [3]