El Tolmo de Minateda es un yacimiento arqueológico situado en Hellín ( Albacete , España ) excavado desde 1988 por un equipo mixto de la Universidad de Alicante y el Museo Provincial de Albacete , dirigido por Jose Antonio Simarro, Sol Colita, Blanca Gamo y Pablo Cánovas, [1] con financiación y autorización de la Junta de Comunidades de Castilla-La Mancha .
El tolmo es un cerro rocoso de forma pilar en una llanura de aproximadamente 7 hectáreas, que se sitúa en un cruce estratégico de caminos entre la parte sur de la Meseta Central y la costa sureste del mar Mediterráneo; esta ruta seguía la vía romana Complutum - Carthago Nova (Toletum-Cartago de Esparta en época medieval). [2]
Un ramal de este camino pasa por la vaguada que conduce al tolmo , conocido con el nombre de El Reguerón y que presenta profundos surcos tallados por las ruedas de los carros, ya que durante milenios constituyó la única vía de acceso al cerro. La posición estratégica del tolmo permitió que estuviera habitado ininterrumpidamente durante más de 3.000 años, desde la Edad del Bronce hasta la ocupación islámica . [2]
Su surgimiento se produjo con los íberos y los romanos . En el año 9 a. C., la ciudad alcanzó el rango de municipio, probablemente con el nombre de Ilunum. [3] Sin embargo, a partir de mediados del siglo II fue decayendo paulatinamente en beneficio de las villas del valle. La actual Minateda no se recuperó hasta el siglo VI, durante el intento de Justiniano de restaurar el Imperio romano de Occidente .
Tras el restablecimiento del control visigodo , surgió aquí una sede episcopal bajo el nombre de Eio, cuyos obispos firmaban en las actas conciliares como "ilicitanae, qui et eiotanae"; esta alusión a Ilici (La Alcudia, Elche ) implicaría algún tipo de dependencia del entonces poderoso obispo de esta ciudad. [4]
Tras la llegada de los musulmanes, la ciudad fue una de las incluidas en el pacto firmado en 713 entre el comes o dux Teodomiro y el conquistador Abd al-Aziz ibn Musa . Mantuvo su existencia durante casi doscientos años, aunque la iglesia debió perder pronto su carácter religioso. Su lugar fue ocupado por un barrio islámico hasta finales del siglo IX cuando la ciudad fue definitivamente abandonada. A partir de entonces el lugar pasó a conocerse como Madīnat Iyyuh (adaptación árabe de Eio), nombre del que deriva la actual Minateda. [2]
La importancia del cerro en la antigüedad empezó a vislumbrarse en el siglo XIX, pero no ha sido hasta las tres últimas décadas cuando se ha intensificado la excavación de sus ruinas.
A la entrada del yacimiento las excavaciones han dejado al descubierto tres estructuras defensivas. La más antigua es de los siglos II-I a.C., de forma ataludada y construida con mampostería, aunque en su interior hay vestigios que se remontan a la Edad del Bronce . [3] En época augustea se cubrió con un muro de sillería para conmemorar la concesión a la ciudad del estatuto municipal, probablemente con el nombre de Ilunum . Unos sillares con inscripciones monumentales han permitido saber que esta obra se realizó en la segunda mitad del año 9 a.C., bajo los auspicios del emperador Augusto y la intervención más o menos directa de Lucio Domicio Ahenobarbo , gobernador de la provincia. [5]
En el siglo VI, los restos de esta muralla se utilizaron para la construcción de un baluarte delantero en forma de L, con puerta abovedada flanqueada por dos torres. Su esquina norte se desmoronó sobre la calzada, dejándola inservible. [ cita requerida ]
En la parte alta del yacimiento se excavó un complejo religioso y palaciego de época visigoda. [5] El edificio principal es una basílica de tres naves separadas por columnas, con ábside en la cabecera y baptisterio tripartito a los pies. Adosado a su lado norte, un edificio de grandes dimensiones y estructura monumental parece que tuvo funciones de representación, administración y residencia. Es posible que se trate del palacio de la sede de Elo o Eio, creado entre 589 y 610 para administrar la parte de la diócesis de Ilici que quedó en manos visigodas, ya que el resto estaba en manos de Bizancio . [5] Alrededor del complejo existía un cementerio con numerosas tumbas y enterramientos reservados a las élites laicas y religiosas, que buscaban la protección de las reliquias de la iglesia.
Al sur del yacimiento se encuentra un recinto cerrado por una larga muralla, probablemente un "castellum" visigodo, que confirma la situación estratégica del tolmo y su relación con la vía que le daba sentido. [ cita requerida ]
A finales del siglo XIX, las laderas fueron pobladas por casas semirrurales que llegaron a formar una pequeña entidad, hasta su abandono a mediados del siglo XX. En el marco del proyecto Tolmo de Minateda se ha iniciado la restauración de las casas mejor conservadas. [6]
Al norte del cerro son visibles vestigios de monumentos funerarios escalonados de época romano-republicana, realizados en sillería o adobe. En su interior se encontraba la urna con las cenizas del difunto, junto con su ajuar. Sobre ésta se documentaron niveles de época imperial, con sepulturas de incineración en urnas depositadas en fosas abiertas en el suelo. Posteriormente se localizó en el yacimiento una necrópolis de enterramiento, en uso desde época tardorromana hasta la islámica. En el mismo cementerio confluían enterramientos cristianos e islámicos, algo raramente encontrado en otros lugares. [7]
La Junta de Comunidades de Castilla-La Mancha declaró el Tolmo de Minateda como uno de sus cinco parques arqueológicos, junto con los de Segobriga, Alarcos, Carranque y Recópolis. [3] Esto supuso obras de consolidación y mejora de las estructuras, la adecuación de dos circuitos visitables y la construcción de un centro de interpretación. El proyecto finalizó íntegramente a principios de 2011 y se abrió finalmente al público el 4 de marzo de 2019. [ cita requerida ]
38°28′35″N 1°36′21″W / 38.4763°N 1.6059°W / 38.4763; -1.6059