Stefan Hedlund

También escribe para World Review [3]​ y para Geopolitical Intelligence Services AG del Príncipe Michael de Liechtenstein .

Ahora enfrenta tres posibles caminos: fragmentación, colapso o consolidación, escribe Stefan Hedlund, profesor de estudios sobre Europa del Este.

Sin embargo, aunque parecía evidente que el proyecto ruso buscaba restaurar una forma de imperio, el comentario de Putin sobre la "catástrofe geopolítica" escondía un significado más profundo y siniestro, particularmente para Ucrania.

En preparación para la invasión a gran escala en febrero de 2022, Putin publicó un artículo cuyo tema principal era que rusos y ucranianos son un solo pueblo, y que, por tanto, no puede ni debe haber un estado ucraniano independiente.

Este argumento se inserta en una larga tradición rusa que niega la existencia de Ucrania o su derecho a existir.

Aunque esta visión es central en la cosmovisión de Putin, no es algo que haya inventado para justificar su guerra contra Ucrania.

La misma convicción se encuentra en el historiador liberal ruso Piotr Struve, quien, aunque crítico con el trato del imperio hacia los judíos y favorable a la autonomía de Polonia y Finlandia, afirmó que una independencia ucraniana resultaría en una "gigantesca e inédita escisión en la nación rusa, lo que, estoy profundamente convencido, llevaría a una auténtica catástrofe para el estado y su pueblo".

Ucrania quedó completamente incorporada bajo Catalina la Grande, a finales del siglo XVIII.

Sin embargo, esta analogía falla en un aspecto clave: Yugoslavia no era un estado dominado por los serbios, mientras que la Unión Soviética siempre estuvo bajo la hegemonía rusa.

Stefan Hedlund