HM Prison Northumberland es una prisión para hombres de categoría C , ubicada en Morpeth, cerca del pueblo de Acklington en Northumberland , Inglaterra . Desde 2013, Northumberland ha sido operado por la empresa penitenciaria privada Sodexo Justice Services bajo contrato con el Servicio Penitenciario de Su Majestad . Los servicios de atención médica son proporcionados por Spectrum Community Health CIC.
Northumberland se formó el 31 de octubre de 2011 a partir de la fusión de HM Prison Acklington y HM Prison Castington [2] y el 1 de diciembre de 2013, la gestión de HMP Northumberland pasó del Servicio Penitenciario de Su Majestad a los Servicios de Justicia de Sodexo . [2] HMP Acklington era la prisión para adultos más al norte de Inglaterra y fue construida en el sitio del antiguo aeródromo de la RAF Acklington .
Cuando Sodexo Justice Services comenzó a gestionar la prisión de Acklington en 2013, la empresa prometió ahorrar dinero a los contribuyentes y se perdieron muchos puestos de trabajo. La Asociación de Oficiales de Prisiones advirtió en ese momento que esto podría provocar fugas y disturbios. [3]
En marzo de 2014, se produjo un "incidente importante" después de que más de cincuenta presos ocuparan un ala de la antigua prisión de Acklington. [4] En agosto de 2014, un recluso hospitalizó a un funcionario de prisiones. En respuesta a este incidente, Mike Quinn, vicepresidente de la sucursal de NAPO en Northumbria, hizo una declaración criticando la "cultura violenta" en la institución, que podría provocar un incidente que no se podría abordar debido a la reducción de personal. Entre 2010 y 2013, el personal de HMP Northumberland se redujo de 441 a 270. [5]
En noviembre de 2014 se produjeron incendios en seis celdas y siete reclusos fueron evacuados de la prisión. Tras la evacuación se produjeron incidentes violentos en el patio de ejercicios. Los reclusos se rindieron después de que se desplegaron agentes adicionales. Los bomberos extinguieron las llamas. [6]
Una investigación de BBC Panorama de 2017 encontró que abundan las drogas ilegales y que el personal penitenciario "no tiene el control". El personal no pudo confrontar a los prisioneros debido a la falta de respaldo y los prisioneros amenazaron al personal. Algunas alarmas de puertas no funcionaron. Los funcionarios penitenciarios individuales se ocupaban de grandes grupos de presos. Se encontró un agujero en una valla de seguridad interna por donde los prisioneros podían salir y encontrar drogas u otro contrabando arrojados por encima de la valla de la prisión. En ocasiones, los prisioneros quedaban incapacitados por las drogas. [7]
55°17′46″N 1°38′04″O / 55.29611°N 1.63444°W / 55.29611; -1.63444