La enfermedad de Preiser , o necrosis avascular ( idiopática ) del escafoides , es una afección poco frecuente en la que se produce isquemia y necrosis del hueso escafoides sin fractura previa. Se cree que es causada por microtraumatismos repetitivos o efectos secundarios de fármacos (p. ej., esteroides o quimioterapia) junto con un suministro vascular defectuoso existente al polo proximal del escafoides. La resonancia magnética combinada con la tomografía computarizada y los rayos X son los métodos de elección para el diagnóstico.
La enfermedad de Preiser se trata inicialmente inmovilizando la muñeca con un yeso. Sin embargo, en la mayoría de los casos, el escafoides avascular comenzará a colapsar, lo que provocará una degeneración en las articulaciones de la muñeca. Esto a menudo requiere una intervención quirúrgica para prevenir la progresión de la artrosis. Dos procedimientos que se realizan comúnmente son: 1. Carpectomía de la fila proximal (PRC), que implica la eliminación de la primera fila de huesos del carpo, es decir, el escafoides, el semilunar y el piramidal. La muñeca se inmoviliza con un yeso durante seis semanas después de la cirugía y luego se inicia la fisioterapia. 2. Escisión del escafoides y fusión de los 4 ángulos, que es un procedimiento que consiste en la eliminación del escafoides y la fijación de los huesos restantes de la muñeca con una placa (llamada "placa de araña") o alambres para proporcionar estabilidad. La placa generalmente se deja dentro de la muñeca del paciente, mientras que los alambres (generalmente alambres de Kirschner) deben eliminarse en una segunda cirugía. Este procedimiento de fusión parcial de la muñeca permite un movimiento limitado de la muñeca, mientras que la fusión total de la muñeca inmoviliza la muñeca de forma permanente. Después de la cirugía, los pacientes afectados pueden tardar varios meses en recuperar la fuerza. Desafortunadamente, ambas operaciones son procedimientos de salvamento y los movimientos de la muñeca se reducirán significativamente. [ cita requerida ]
Descrito por primera vez por Preiser en 1910 en 5 pacientes, todos con antecedentes de traumatismo de muñeca y fracturas de escafoides en 3 de ellos.