El vuelo 8261 de Binter Mediterráneo, ocurrido el 29 de agosto de 2001, se estrelló en la carretera N-340 , a unos 200 metros de la pista 32 del Aeropuerto Internacional Ruiz Picasso de Málaga (España) . El capitán informó al Control de Tráfico Aéreo de Málaga de un incendio en el motor de babor del avión durante la aproximación final. El incendio resultó ser una falsa alarma pero, al seguir los procedimientos de emergencia, el primer oficial apagó inadvertidamente los dos motores del avión. El avión descendió, chocó contra las luces de aproximación del aeropuerto y se detuvo junto a la N-340 .
De las 47 personas que iban a bordo, cuatro murieron, incluido el capitán. [2] El avión fue desguazado. [3]
El vuelo 8261 de Binter Mediterráneo despegó del aeropuerto de Melilla a las 09:37 CEST del 29 de agosto de 2001, [1] : 1 con 47 personas a bordo (44 pasajeros y 3 tripulantes). [1] : 3 El tiempo era bueno.
Durante la aproximación a la pista 32 de Málaga, una luz de aviso en la cabina indicó un incendio en el motor de babor. [1] : 123 [3] En realidad, se trató de una falsa alarma, posiblemente provocada por humedad y/o suciedad en la circuitería, aunque la tripulación no lo sabía. [1] : ix, 125 [CIAIAC 1] [CIAIAC 2] El capitán continuó la aproximación, mientras el copiloto seguía el procedimiento de emergencia ante un incendio de motor. [3] En el proceso, activó erróneamente las manetas de incendio del motor derecho así como del izquierdo, provocando que ambos se detuvieran. [1] : 124 [3] El avión aterrizó a unos 500 m (1.600 ft) del umbral de la pista y se detuvo contra el terraplén de la autopista N-340. [1] : 4 El piloto no comunicó ninguna información sobre la emergencia en curso a la tripulación de cabina y, en consecuencia, no se instruyó a los pasajeros para que asumieran la posición de apoyo antes del impacto. [1] : 124
En el accidente murieron tres pasajeros y el piloto.
Aunque la ejecución incorrecta del procedimiento de emergencia por parte del copiloto fue la causa principal del accidente, los investigadores descubrieron que no había recibido ningún entrenamiento en simulador sobre procedimientos de emergencia por parte de la aerolínea. [1] : 125
La investigación también consideró que la falta de cumplimiento de los procedimientos de mantenimiento pertinentes fue la causa más probable de la falsa alarma de incendio. [1] : 125
Los restos del avión fueron trasladados a la factoría CASA Sevilla, para su investigación. Una vez concluida la investigación, el avión fue desguazado. No obstante, se salvó la cola, que se exhibe en el Museo Aeronáutico de Málaga