La canalización legal es el acto de hacer legalmente responsable a una entidad por un evento, y de esa manera eximir a otras partes de responsabilidad por un evento. [1]
Por ejemplo, la responsabilidad civil en las centrales nucleares suele recaer en el operador de la central. Por tanto, los contratistas que trabajan en una central nuclear no tienen que tener un seguro en caso de que uno de sus empleados provoque un accidente con daños a terceros como consecuencia.