La Toma del Congreso Nacional de Venezuela , también conocida como Asalto al Congreso Nacional , [1] fue una reyerta ocurrida el 24 de enero de 1848 en la sede del Congreso de Venezuela en Caracas que marcó la ruptura definitiva entre conservadores y liberales , que habían llevado casi dos décadas de enfrentamientos continuos. [2] [3]
A principios de 1848, el Congreso discutía el proceso contra el presidente José Tadeo Monagas por actos violatorios de la constitución . Se le acusaba de haber ejercido poderes extraordinarios de manera ilegal, de haber usado la fuerza armada sin el consentimiento del Consejo de Gobierno y de haber ejercido la administración fuera de la capital. Esto derivó en una fuerte disputa política entre el gobierno de José Tadeo Monagas, apoyado por el Partido Liberal , y el de José Antonio Páez , apoyado por el Partido Conservador .
El 24 de enero de 1848 el ministro de Interior y Justicia, Martín Sanabria, se trasladó a la sede del Poder Legislativo para rendir el informe anual del Poder Ejecutivo. Estando en el recinto, el vicepresidente de la Cámara de Diputados pidió que permaneciera en la sala. [4] Fuera del Congreso corrió el rumor de que Sanabria había sido detenido o asesinado, lo que enfureció a la turba liberal en la calle, que intentó entrar pero fue repelida por la guardia, iniciándose el enfrentamiento. Durante el suceso, Santos Michelena fue herido por una bayoneta , y sucumbió a sus heridas dos meses después, el 12 de marzo. Los parlamentarios Francisco Argote, José Antonio Salas y Juan García también fueron asesinados por la turba, al igual que el sargento Pedro Pablo Azpúrua y un sastre involucrado en la reyerta. El jefe de la guardia del cuerpo legislativo, Guillermo Smith, también resultó herido durante el enfrentamiento. Monagas, alertado de los acontecimientos en curso, acude a caballo acompañado del general Santiago Mariño y sus fuerzas a restablecer el orden. [3]
Tras los acontecimientos, el parlamento tardó años en recuperar su autonomía. El Poder Legislativo y el Poder Judicial perdieron su independencia y quedaron bajo el control directo del Presidente de la República. El Congreso Nacional, que presumía el procesamiento del presidente al inicio de los acontecimientos, lo destituyó. Hasta ese día, el Congreso Nacional contaba con la mayoría de representantes del partido conservador, muchos de ellos, por miedo, pidieron asilo, delegaciones o huyeron a Curazao [5] [6] [7]
Páez y los conservadores fueron desalojados del poder, que pasó a manos de Monagas y los liberales, por lo que los conservadores tomaron el camino de las armas tratando de recuperar el poder. Páez se levantó contra Monagas pocos días después del 24 de enero; pero fue derrotado en la batalla de Los Araguatos y tuvo que refugiarse en la república de Nueva Granada . A mediados de 1849 desembarcó en La Vela de Coro, e inició otra batalla pero fue derrotado nuevamente por las tropas gubernamentales, comandadas por José Laurencio Silva, quienes le ofrecieron la capitulación, pero Monagas se negó a reconocer los términos de la capitulación ofrecida por Silva, y en consecuencia Páez fue encarcelado, y finalmente exiliado. [4]