Araniaka significa ‘[texto] de los bosques’, y es un tratado para los sadhú (santos) que abandonaban el mundo para vivir en la naturaleza.
Estos textos contrastan así con los grijia sutras (grihya sūtra: ‘aforismos para el hogar’, siendo grija: ‘hogar’ y sūtra: ‘hilo, aforismo’), que son tratados acerca de la adoración a los dioses dentro de la vida doméstica.
Sirvieron como receptáculo de adiciones posteriores al corpus védico.
Contienen discusiones (al estilo bráhmana) acerca de rituales particularmente «peligrosos», tales como el majá vrata (‘gran voto’) y el pra-varguia (pravargya), que por lo tanto deben aprenderse en la selva.
Sin embargo, no tienen relación con —como la tradición posterior afirmaría— con saniasis (sabios vagabundos) o vanaprasthas (ermitaños) y tampoco son de naturaleza mística, sino textos de liturgia para bráhmanas (sacerdotes ritualistas ordinarios) casados.