Amigos para toda la vida ( en italiano : Amici per la pelle , también conocida como Amis pour la vie en Francia) es unapelícula de comedia dramática italiana y francesa de 1955 dirigida por Franco Rossi . Fue nominada a "Mejor película" en la décima edición de los Premios de Cine de la Academia Británica .
Roma. Mario es un chico de catorce años seguro de sí mismo que cursa octavo grado. Un día llega a clase un nuevo alumno, Franco, a quien la profesora coloca en el pupitre de Mario.
Al principio, Mario se muestra hostil hacia el recién llegado, pero éste demuestra ser un chico inteligente y pronto se gana la simpatía de sus compañeros y profesores. Sin embargo, después de un tiempo, los dos chicos empiezan a conocerse y a hacerse amigos.
Mario es hijo de un empresario cerámico, mientras que Franco es hijo de un diplomático, vive en un hotel y bebe zumo de tomate como aperitivo.
Mientras Mario se muestra confiado al acercarse a las niñas, Franco se muestra indeciso y sólo tras cierta insistencia por parte de Mario se descubre que la niña tiene una persona en su corazón y también le confía dónde vive, exactamente en una villa de la Vía Apia, pero dice también que no la ve nunca porque no sale nunca de casa. La describe como "Ingrid Bergman con el pelo negro".
Un día Mario decide no ir a la escuela e intrigado por la historia de su amigo, va a la villa para averiguar quién es esa chica. Descubrirá que la villa es la antigua casa de Franco, donde había muerto su madre. Al volver con su amigo para hablarle al respecto, inicialmente reacciona mal pero luego regresa a su antigua casa en compañía de su amigo y entonces estalla en un llanto liberador. Los dos se hacen tan amigos que se toma la decisión de que Franco se vaya a vivir con la familia de Mario, para tener una vida algo estable.
Luego, por otro lado, los dos chicos participan en el campeonato nacional de cross-country: durante las carreras se enfrentan en la final.
La carrera la gana Franco: Mario, enfadado, les cuenta a sus compañeros sobre la madre de Franco, a quien había jurado guardarle el secreto. Franco finge estar físicamente enfermo para ocultar su profunda decepción con Mario, y luego decide irse con su padre, para no volver jamás. [1]